Ay, cómo hemos cambiado

Madre mía… todo lo que ha pasado desde 2015… Hemos superado una pandemia mundial, nos hemos hecho más viejas y lucimos las canas orgullosas y hemos mejorado (mucho) nuestra selección de vinos. 

Apúntate a hacer un repaso con nosotras y comparar vinos míticos de nuestras primeras temporadas con los vinazos que tenemos ahora. Un plan súper divertido y un tanto nostálgico en el que te pedimos que traigas (en papel o en digital) una foto tuya de hace 10 años para ver “cómo hemos cambiado” en todos los aspectos. 

¿Te atreverás? 

Acompañaremos con lo mejor de nuestra selección de quesos de la última decada. ¡Por todo lo alto, faltaría más! 

¿Cuándo? JUEVES 20 DE MARZO a las 19.30h
Duración aprox.: 2 horas
Precio por persona: 35 €
Lugar: La Manducateca (General Concha, 7)

IMPORTANTE:

1- Marca siempre la opción «recogida en tienda» para que no se te carguen gastos de envío.  ¡NO es necesario pasarse por la tienda antes del día de la cata para recoger la entrada!

2 – Si tienes un bono regalo, acuérdate de meter el código correspondiente como forma de pago (llámanos o escríbenos al 640 084 075 si tienes alguna duda).

3 – En caso de apuntarte, si finalmente no puedes acudir, te haremos un vale para otro evento o para gastar en tienda siempre y cuando nos avises antes de las 48 horas anteriores a este evento. 

*La imagen es únicamente ilustrativa

35,00

Sin existencias

Customer Reviews

Based on 1 review
100%
(1)
0%
(0)
0%
(0)
0%
(0)
0%
(0)
F
Francisco Berenguer Fernández
Hemos cambiado, si, pero a mucho mejor

Una cata divertidísima donde hemos recorrido la evolución de una sección de La Manducateca durante estos diez años, comparando aquellas primerizas con sus homónimas actuales. Mientras que, la estantería ha pasado de ser uno de esos rinconcitos funcionales y monos de la tienda, convirtiéndose en un Espacio con mayúsculas, personalidad propia y una comunidad de fieles, nosotros, hemos ampliado nuestra mochila vinícola. Donde antes teníamos un gusto más marcado y sesgado, ahora huimos de sentirnos como en una serrería cuando bebemos y lo defendemos sin sonrojarnos, introducimos más tonos en nuestra paleta de botella, prescindimos del maridar y le damos más al disfrutar. En resumen 10 años en los que hemos cambiado, pero a mucho mejor.